Buscando noticias para nuestras redes sociales (Facebook: El Placer es Nuestro y Twitter: @elplacernuestro) me encontré con una en la que hablaban de una escuela para mujeres bastante especial. Hace años había escuelas para aprender a cocinar, ser una buena madre, contentar a tu esposo y a la sociedad… En definitiva, hacer de ti una mujer “como Dios mandaba”. Ahora las escuelas han cambiado el programa y lo que se enseña es a practicar a tu marido un buen sexo oral, aprender a aceptar y disfrutar del sexo anal, proporcionar a tu hombre el mejor orgasmo y, por último, conocer las mejores técnicas sexuales. ¿Dónde está esta escuela tan peculiar? ¡En Rusia!
En este país, Ekaterina Liubimova y otras seis profesoras, enseñan estas sorprendentes asignaturas a no pocas alumnas con la intención de que aprendan a dar placer a su marido y, de paso, disfruten ellas (esta es la sensación que tuve al leer el artículo). La entrada para hombres está prohibida y, por ahora, no tienen intención de aceptarlos, aunque sí que dan cursos para que ellas les instruyan a ellos en el arte del sexo. La verdad es que esta escuela me parece, como sexóloga, una muestra de las peculiaridades del lugar y de la sociedad donde se ha desarrollado la escuela, ya que por un lado no aceptan la homosexualidad, pero sí una escuela donde se imparte una docencia bastante inusual. ¿Por qué será? La verdad es que creo que es porque no es una escuela para que las mujeres aprendan a disfrutar de su sexualidad y, de paso, lo hagan con sus parejas, sino que su mayor objetivo es educar a las mujeres para que satisfagan a sus hombres y, si pueden y los hombres quieren, gocen ellas también. Las profesoras quieren exportar esta idea a países como es España, pero… ¡con el placer se han topado! En nuestro país ya existen escuelas de placer como es Sex Academy Barcelona (http://www.sexacademybarcelona.com/es/) que, además, sí que es una verdadera escuela de la educación sexual. En este centro se promueve la comunicación positiva y asertiva en la pareja, que es la mejor técnica para que se den unas relaciones sexuales de diez.
Es verdad que la existencia de profesionales que ayuden a las personas a mejorar su sexualidad es de lo mejor que puede ocurrir, pero siempre si lo que buscan es enriquecer los recursos de las personas con la intención de que se conozcan individualmente para después, si quieren, compartir sus hallazgos con su pareja sexual. Enseñar a satisfacer antes de disfrutar contigo misma puede desembocar en una disfunción sexual y, sobre todo, en problemas de pareja, ya que las mujeres que van a esta escuela pueden sentir que dan mucho sexualmente recibiendo poco o nada a cambio.
¡Gracias por leernos!
Blanca de Lamo Guerras
Psicóloga y Terapeuta de pareja y sexual
El placer es nuestro